El Marquesado de Corpa

Desconozco cuando se produjeron los primeros asentamientos en la Villa, ni si existió presencia celtíbera, romana o judía, pero estamos seguros que por Corpa pasaron musulmanes y cristianos.  

Tras la conquista del Alfoz en el 1118, la comarca de Alcalá (de la que ya hablamos en otra publicación de este blog), fue recuperada de los musulmanes e incorporadas con reconocimiento Papal al Arzobispado de Toledo.  Incorporación que afecta también a Corpa como miembro de la comarca.

Por ello, tanto el Fuero Viejo (1135) como el Fuero Nuevo (1509), otorgado este último por el Cardenal Cisneros, regirían también sobre la tierra Corpeña.

Así permaneció hasta 1578, año en que se convierte en Villa y como toda la comarca, se desmembró de Toledo por bula pontificia incorporándose a la Corona. Se vendió después al marqués de Salinas quien a su vez lo puso en manos de los Marqueses de Móndejar.

El I Señor de Corpa, Don Mateo Ibañez de Segovia (Segovia, c. 1590 – Madrid, c. 1650) fue quien primero ostento un titulo nobiliario con el nombre de la Villa (y es probablemente quien  mando construir el Palacio)

Con Felipe IV España gozaba de buena salud y esplendor y fue la época en la que Corpa también brillaba debido al peso que los marqueses de Mondejar tenían frente a la Corona y al gobierno Central.  Mateo Ibañez fue consejero de hacienda con Felipe IV.  Además en los siglos XVI y XVII. eligieron Corpa como lugar de residencia varios hidalgos desterrados de sus posesiones, eso hizo que la villa tuviera un peso importante en la comarca.

Posteriormente los Ibañez de Segovia fueron enviados a Perú como Virreyes dónde se afincaron y formaron parte de la vida social y política durante siglos.  Alejándose en gran medida de sus pertenencias en España.

En 1683 el rey Carlos II, otorga el Marquesado de Corpa a Luis Ibáñez de Segovia y Peralta.  ¡El Señorío se convierte en Marquesado!

Pero la suerte de este linaje fue dispar y tuvieron varios momentos de matriarcado y de endogamia para poder mantener sus títulos y pertenencias.

Debido a esta situación se documentó alguno de los viajes que desde Perú se hicieron a España por la confirmación nobiliaria de esta familia.  Uno de los viajes de Juan Jose de la Puente (ver foto superior) y su cuñado a España, deja claro, que además de los títulos, su posición debía consolidarse a través de la obtención de otros honores y prerrogativas, tales como la investidura de hábitos militares en alguna de las órdenes nobiliarias de caballería y la inscripción de los hermanos de la Puente como nobles hijosdalgo en la Real Chancilleria de Valladolid.  Para ello tenían que ratificar el medio del que su familia era originaria y fue por ello por lo que recuperaron en gran medida el Palacio y las tierras en Corpa (el Palacio terminó de construirse).

Casi más de un siglo después, en 1821, se consiguió la independencia en Perú.  El VI Marqués de Corpa fue uno de los firmantes activos para conseguir dicha independencia y con ello se perdió el título nobiliario.

En el año 2006 tuve la ocasión de contactar con José de la Puente.  José es uno de los descendientes vivos de aquel linaje y que aportó mucha información al respecto de su familia.  Incluso llego a visitar nuestra localidad y encontrarse con el Palacio en uno de sus peores momentos.

El titulo nobiliario existe a día de hoy aunque fue asignado de manera reciente en otra línea sobre la familia Goyeneche.