Hoy quiero presentaros algo en un línea diferente a la que he venido realizando en los últimos días. Se trata de milagros "documentados" y acontecidos en la Villa de Corpa a lo largo de la historia.
Y es que no han pasado desapercibidos en mis búsquedas, y aunque a día de hoy se quedaran en meras anécdotas poco creíbles, en su momento fueron motivo de estudio e incluso algunas tuvieron repercusión a nivel nacional.
Hay que tener en cuenta que España, en los siglos XVI y XVII, es indudablemente un espacio particularmente favorable a la proliferación de relatos milagrosos. Cuenta entre los países cristianos de mayor dinamismo en cuanto a frecuencia de apariciones (sobre todo mariales) y edificación de nuevos santuarios en los siglos XIV, XV, XVI.
Quizá el primero que debo mencionar tiene que ver con Collantes y la inexplicable incorruptibilidad de su cuerpo, pero no me quiero parar ahí sino en el hecho de que me he topado en mis lecturas sobre la Villa prácticamente con todos los prodigios y milagros posibles, entre los que destacan: sanación, apariciones, levitación, clarividencia e incluso bilocación (capacidad de estar en dos sitios a la vez).
"El año mil seiscientos veinte y siete siendo Vicario de la Santa Ermita el Padre Fr Diego Baptista, resucitó nuestra Señora de los Llanos en la Villa de Corpa, un niño de cinco años, a quien había muerto de una coz una mula, y su padre a cuyas instancias, y oraciones le resucitó nuestra señora, fue a su Ermita a darle las gracias, y lo certificó con juramento delante de dicho Padre, y de otros testigos"
Que coz no le daría la mula al niño que lo mató y hubo que pedir a la virgen que lo resucitara.
También encontré el relato dónde un vecino de Corpa "caía aturdido al suelo y permaneció inconsciente durante casi veinticuatro horas", pero durante su letargo otros vecinos manifestaban haberle visto por el pueblo.
Quizá fuese Carmelo, el borracho personaje de Amanece que no es poco, que no es que viera doble cuando bebía sino que se desdoblaba.
En otra ocasión cuentan de un vecino que tras llamar a la puerta y acercarse a abrirla encontró a un hombre que distaba del suelo varios pies y que tras entablar conversación se dio la vuelta y siguió levitando hasta su desaparición.
Sólo faltaba que en estos días de cuarentena llamaran a tu puerta y te sucediera esto. Sería un síntoma irrefutable de que el virus ya te había alcanzado.
Pero por seguir con apariciones
" en el inmediato pueblo de Corpa ocurrió según se dice, días pasados un hecho milagroso acerca del cual circulan varios y maravillosos rumores. Hallábase celebrando el santo sacrificio de la misa el párroco del pueblo, y en el momento de la consagración aparecióse la imagen del Señor en medio de una claridad vivísima contemplada con admiración por los fieles que se hallaban en el templo. Ante suceso tan portentoso, dícese que se interrumpió la sagrada ceremonia, siendo presa el oficiante de profunda emoción. Sobre este acontecimiento extraordinario se hacen los comentarios consiguientes, siendo varios los vecinos de Corpa llegados a esta ciudad que aseguran haber presenciado hecho tan milagroso."
Y esto no sucedió solamente una vez en 1884 Dios también se apareció en la sagrada forma
"...en un día de fiesta, según referí oportunamente, empezó a dar voces al alzar la hostia. exclamando: ¡Vengan ústedes a ver la cara de Dios que se representa transparente en la forma!. Todos los presentes, hombres, mujeres y niños, se acercaron a verlo y percibieron perfectamente la figura, aunque algo indecisa, con su cabeza, hombros, barba, etc..."
De esta aparición en concreto se hicieron eco muchos de los periódicos nacionales, no faltando quienes exaltaban el acontecimiento y quienes se burlaban de el.
En 1896 tras aparecerse la Virgen en un pozo otorgó a una vecina de Corpa la capacidad de vaticinar el futuro, ...o eso decían
"...era capaz de acontecer lo que estaba por venir atribuyendo sus virtudes al milagro de la Virgen, cuya imagen apareció en este pozo y que fue certificado por el Dr. Martínez, Cirujano de la villa de Corpa..."
Así que ya sabía el Corpeño, que si había algo que le inquietaba, atormentaba o perturbaba, no hacía falta llamar a la Esperanza Gracia teníamos nuestro propio consultorio local.
¿Qué os parecen los relatos? Curiosos ¿verdad?
0 Comentarios
Danos tu comentario y contribuirás a que esta iniciativa siga viva